GESTIÓN HOLLYWOOD El “niño que nunca fue de oro” se desploma

Es indudable que la imagen de la gestión municipal capitalina está en franca decadencia y los números que esconden los funcionarios municipales ya dan una muestra de desesperación. A los 10 puntos electorales de caída de los últimos meses del año 2010, ahora se suman otros 5 puntos más, con lo que “Camau”, apenas llega al 35 por ciento de intención de voto y solo un 22 por ciento de “imagen positiva”. La tarifaria lo empujó hacia abajo.

Pero estos dos últimos días de lluvia, posiblemente se hayan llevado otros dos puntos por lo menos y ya los intendentes como Nancy Sand y Locatelli de Rubín, incluso Alterats y Galantini, comienzan a mirar con recelo el “falso protagonismo” que le brindaron a ex olímpico al otorgarle tantas “preseas” en el justicialismo correntino.

Por otro lado, Fabián Ríos, el derrotado candidato a gobernador del 2009 y la “corporación de los dinosaurios”, que suspendieron casi ridícula y antidemocráticamente las elecciones partidarias en la segunda ciudad de la provincia, vuelven a los subsidios casi millonarios, para comprar voluntades que no le sirvieron ya en las generales y en apariencia tampoco le servirán ahora.

Por ahora, solo consiguieron el apoyo de un intendente por dos millones de pesos y apenas un potencial de menos de dos mil votos, como es el caso de Paso de la Patria.

GESTIÓN INEXISTENTE
Pero si algo le faltaba a esta gestión derrochadora de “dineros públicos”, en publicidad oficial, de sobreprecios y denuncias de corrupción cada vez mayores, de la desaparición de la Guardia Urbana, de la desaparición del Servicio de Emergencias y de la falta total y absoluta de Inspectores de tránsito que “prevengan y eduquen sobre seguridad vial ciudadana” y no solo se dediquen a “hacer multas e incautar motos”, fue la lluvia caída en 48 horas.

Lenta y constante, la lluvia no debía causar mayores inconvenientes si el sistema de drenaje ciudadano, estuviera en condiciones o por lo menos en las condiciones en que la “publicidad alquilada por Camau” la muestra.

Sin embargo, los desagües taponados por la falta de mantención municipal que afectan no solo a barrios periféricos sino a toda la ciudad, dieron una muestra acabada de que “esta gestión de cartón pintado, dinero a raudales e ineficiencia”, solo es la foto de una vieja película en blanco y negro.

Los barrios anegados por las últimas lluvias son varios, los sectores de la capital correntina donde con cada lluvia, el tránsito por calles de tierra se vuelve imposible es cada vez mayor.

Los vecinos piden el cumplimiento de las promesas electorales del medallista como la pavimentación a la arteria principal del Pirayuí o de sectores en iguales condiciones como los barrios Doctor Montaña, Esperanza, Ponce, entre otros.

Ya no solo con cada lluvia se muestran las falencias de esta gestión inservible, estancada, sino que ahora, los basurales en permanente crecimiento, la falta de obra pública, el caos vehicular, el desmanejo institucional, el costo de la escribanía del Ejecutivo como es el Concejo Deliberante, entre otros temas, ya no tiene red de contención.

La falta de calidad en la salud en los SAPS y en los CAPS, donde ni siquiera leche entregan si no muestran el carnet de afiliados al PJ, a las madres que por derecho les corresponde.

La desaparición de las cooperativas del Plan “Argentina Descansa”, donde se pasó de quedarse con la mitad del sueldo que Nación manda a los beneficiarios a directamente no pagarles un solo centavo.

“Camau” vive sacándose fotos con funcionarios de cuarta línea en Buenos Aires, mientras su padre, procesado por la usurpación de tierras en la isla Meza, maneja los hilos conductores desde una oficina de calle Catamarca, escondido en la “Casa del Vecino”.

Al Intendente de la Municipalidad de Corrientes “Camau” Espínola, como a Ríos ya no los reciben en el gobierno nacional y los interlocutores pasaron a ser Alejandro Karlem, Rodolfo Martínez Llano, entre otros. Ni el montonero Perié, se acerca a los pasillos de Casa Rosada.

La capital correntina está en su peor momento. “Camau” demostró su poca capacidad para ser un “piloto de tormentas”, tal vez por eso, nunca logró lo que siempre prometió cada vez que iba, con dinero de los argentinos a competir en las olimpíadas.

La medalla de oro que nunca logró como deportista, fue una vana promesa de “niño caprichoso”, pero en la gestión municipal no está en condiciones de competir ni siquiera por la de “bronce”.