“Personalmente sostengo siempre que al ciudadano común y al trabajador particularmente le importa poco las rencillas partidistas, la politiquería barata y la falta de criterios y responsabilidades de los funcionarios públicos, elegidos por el pueblo, a la hora de legislar y de cumplir con honestidad esos cargos. Si los correntinos no cambiamos la manera de hacer y ver la política difícil será que logremos avances a futuro, debemos acabar con las cooperativas partidistas, familiares y compinchitas para llevar a los cargos públicos a hombres y mujeres capaces de anteponer ante todo los interese del pueblo y de la sociedad toda…”